La encuesta personal: suele hacerse en el domicilio del
entrevistado o en su lugar de trabajo, por lo que tiene un índice de respuesta
alto y un coste elevado.
La encuesta de establecimientos: es parecida a la anterior, pero se
diferencia en que se lleva a cabo en un establecimiento comercial.
La encuesta telefónica: tiene un índice de respuesta aceptable,
alrededor del 50%, y permite grabar la entrevista. Es rápido y barato.
La encuesta por medios informáticos: se puede realizar mediante dos
sistemas; CAPI en el que el entrevistado responde a la encuesta frente a la
pantalla de un ordenador que le va
mostrando las preguntas y pidiendo las respectivas respuestas, y CATI donde el
entrevistador anotas las respuestas del entrevistado a través del teléfono en
un cuestionario informatizado.
Encuesta ómnibus: son firmas especializadas que se ocupan de
realizar periódicamente encuestas sobre distintos temas.
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